Hablamos con activistas para conocer cuánto ha avanzado la lucha por los derechos de la comunidad LGBT+ en nuestro estado
El 16 de mayo del 2019, el Congreso del Estado tomó una decisión que nadie vio venir, cuando, con 14 votos a favor, 12 en contra y una abstención, aprobó la legalización de los matrimonios entre parejas del mismo sexo en San Luis Potosí, con lo que San Luis Potosí se convirtió en el Estado número 18 en reconocer este derecho. A dos años de ese momento histórico para nuestra sociedad, hacemos un repaso de cómo ocurrió ese cambio y de las repercusiones sociales que ha tenido.
Lo primero es que esa decisión logró modificar los Artículos 15, 105 y 133 del Código Familiar del Estado de San Luis Potosí, con lo que ahora un matrimonio entre personas del mismo sexo conlleva el mismo proceso que los heterosexuales; sin embargo, es importante apuntar que en San Luis, desde el 2015 parejas del mismo sexo han contraído matrimonio gracias a la figura del amparo, el cual varias organizaciones civiles como Red Diversificadores Sociales ayudaban a los interesados para que lo presentaran.
Antes de la aprobación de matrimonio igualitario, solo en 2018 se registraron 30 matrimonios entre parejas potosinas del mismo sexo; sin embargo, se habían dado en otros estados.
Actualmente en México las entidades donde las parejas del mismo sexo se pueden casar son: Aguascalientes, Baja California Norte y Sur, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Colima, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro (en la capital), Quintana Roo, San Luis Potosí, Tlaxcala y Zacatecas en algunos municipios, los cuales “contemplan en su legislación el matrimonio como la unión entre dos personas, sin importar su preferencia sexual”.
En cuanto a la adopción de niños por parejas del mismo sexo, si bien, antes de 2019 no estaba permitido contraer matrimonio ni adopción de menores, era posible que personas solteras adoptaran, por lo cual, no había legalmente un impedimento para adopción para formar una familia homoparental.
Consultamos con los activistas Andrés Costilla, presidente de la organización civil Amigos Potosinos en Lucha contra el Sida, y Paul Ibarra, dirigente de Red Diversificadores Sociales, para saber si realmente la aprobación de los matrimonios entre personas del mismo sexo ha hecho cambios significativos en la comunidad LGBT+.
“Hace dos años conmemoramos el Día Nacional de la Lucha contra la Homofobia, con avances importantes en la lucha de derechos como la aprobación de la corrección en la identidad sexogenérica y el matrimonio que reducen la brecha de desigualdad LGBT+”, mencionó Costilla.
Por otro lado, en cuanto a lo que hace falta en la lucha de esta comunidad, el activista mencionó que en cuanto a la desigualdad de poblaciones en el Estado, no se reducen al matrimonio, “porque en San Luis hay un estigma, discriminación y homofobia”.
Además, Andrés apuntó que las personas transgénero no tienen el apoyo del sector salud que requieren, pues dijo que, al ser considerados como poblaciones en vulnerabilidad, el Estado está obligado a realizar acciones integrales en la transición de género.
Por otro lado, Paúl Ibarra, comentó: “con esta modificación al Código Familiar, cada vez más parejas LGBT deciden acceder a este tipo de derechos, pero creo que hace falta que el gobierno promueva dichos enlaces y más educación sobre el tema”.
Es así, que Paúl recalcó que si se hiciera mayor difusión sobre los matrimonios igualitarios en San Luis Potosí, éste podría convertirse en un estado único en el bajío, lo cual atraería parejas homosexuales, sería una manera de incentivar el turismo y reactivar la economía, tal como sucede en Jalisco.
Además, el activista dijo que otra de las diferencias que ha notado de 2019 a la fecha es la tolerancia y respeto a las uniones de parejas del mismo sexo, “aún falta mucha educación en la sociedad, pero conforme más parejas se unen, hay mayor apertura y normalización de estas demostraciones de afecto”.
Finalmente, Paúl Ibarra dijo que la educación es otro pilar fundamental en la sociedad y detalló la necesidad de contenidos en program as educativos sobre estas demostraciones de afecto, pues recordó que aún en la actualidad es común que un adolescente que descubre su sexualidad sea rechazado por su familia, “es necesario proteger a la comunidad LGBT de violencia, a través de reeducar a las personas, pues nos han socializado en una sociedad machista y homofóbica”.
Fuente: La Orquesta